De todo comienza a ser ya mucho tiempo

El sol entró por su ventana, obligándola a abrir lentamente los ojos. Había pasado una noche terrible... de aquellas. Los sueños la habían atormentado, recordándole las cosas que debía olvidar, sobretodo ese día.

Entró al baño y mientras Sabina le cantaba al oído "Cualquier tiempo pasado fue peor", ella intentaba borrar de su mente los recuerdos con el agua que caía lentamente por su cuerpo, diluyendo a su paso todo rastro de nostalgia.

Se levantó sin querer mirárse al espejo. Mientras menos conciencia de ella misma tuviera ese día... mejor. Mientras más rápido pasara el tiempo, metida entre libros, trabajos, enajenada en la computadora... quizá no tendría tanto que lamentar, quizá hasta olvidára la fecha.

Salió presurosa hacia el trabajo, se puso los zapatos mientras bajaba las escaleras y dejó deliberadamente el celular en su cuarto. No quería que pudieran localizarla. Hoy no estaba para nadie.

Durante el día, se metió más que nunca en su trabajo, sacó tantos pendientes que llevaba tiempo retrasando y adelantó algunas llamadas.

Salió de la oficina con animo victorioso, no se había dejado vencer, había soportado toda la jornada decentemente.

Después, a clase, algo irritable, pero salvó bastante bien la faena. Cada página que pasaba en su cuaderno, iba quedando como huella del combate -sin fecha-.

Entrada la noche, al llegar  a casa, prensió su computadora, puso "aquella canción"  y abrió su blog, donde comenzó a escribir. La realidad la golpéo con gesto desafiante, al ver la fecha en el monitor: 19 de Marzo. Y entonces no pudo negarlo: 

Hoy sería su aniversario...